Historia

Este antiguo paso, compuesto por 6 figuras, representa el momento en que Nicodemo y José de Arimatea proceden a desenclavar el cuerpo de Jesús de la Cruz mientras la Virgen, San Juan y Maria Magdalena contemplan la escena y esperan recibir dicho cuerpo. El autor de las tallas es desconocido, aunque se atribuyen a la escuela castellana de mediados del siglo XVII. Las imágenes, aunque pequeñas, tienen un enorme valor artístico. Es un paso de gran devoción entre los feligreses de la Imperial Iglesia de Santa María de Palacio, lugar donde se venera la imagen del Cristo crucificado en la capilla de La Antigua.

Inicialmente este paso lo portaban 6 cofrades. En el año 1958 y debido al gran deterioro de las andas, el paso no pudo salir, siendo necesario construir unas nuevas. Éstas fueron diseñadas por Alfredo Ruiz y fabricadas por Ruperto Grijalba. Ese mismo año se procedió a la restauración de las imágenes, pasando a ser doce los portadores repartidos en 6 varas. Posteriormente se añadieron dos varas más para que pudiese ser llevado por 16 cofrades. En el año 2002 la Cofradía financió una nueva restauración de la imagen del Cristo crucificado, volviendo a recuperar su aspecto original. Históricamente ha procesionado en el Vía Crucis del Viernes Santo junto con la imagen del Santo Cristo de las ánimas, en el entorno de la Iglesia de Santa María de Palacio, además de participar en la procesión del Santo Entierro. En el año 2005 la Cofradía El Descendimiento creó suprocesión titular: la procesión del Sagrado Descendimiento de Cristo. Este paso también es conocido como el de los “enanitos”, por el pequeño tamaño de las figuras, el de “las escalerillas”, o también el de “los enfermos”, ya que, al parecer, la imagen del Cristo estuvo guardada durante algun tiempo en la Capilla en el antiguo Hospital.

En los últimos años, y gracias a la colaboración de los hermanos de la Cofradía y la generosidad de anónimos donantes, se han podido renovar los faldones del paso y las almohadillas para los portadores, cambiando del antiguo color rojo al morado actual. Debido a la falta de espacio en la Iglesia de Palacio para tener expuesto el paso permanentemente, éste es guardado durante el año por partes en distintas dependencias. La mañana del Jueves Santo es un momento muy especial para nuestra hermandad. Nos reunimos en nuestra sede canónica, la Iglesia de Palacio, para montar el paso con las distintas figuras, andas, iluminación, faldones y demás elementos necesarios. Finalmente, con la decoración floral hacen de éste uno de los pasos más bellos de la Semana Santa Logroñesa. El paso permanece expuesto durante el Jueves Santo y Viernes Santo en las inmediaciones de la Iglesia de Palacio, si el tiempo lo permite. Finalizada la procesión de Viernes Santo, se desmonta y se vuelven a guardar todos los elementos a la espera de la Semana Santa del próximo año.